Eutanasia: Un Acto de Amor y Compasión Hacia Nuestros Compañeros de Vida

Según la BCN: La eutanasia es la intervención aceptada voluntariamente por el paciente y realizada por un profesional médico, que acelera la muerte de un paciente desahuciado, con la intención de evitar sufrimiento y dolor innecesario.

En Chile, donde se ubica nuestro crematorio de mascotas, es una práctica autorizada solo para animales y no para humanos. Debido a esto y a las leyes inexistentes en Chile para estas prácticas, nuestro compromiso con la eutanasia ha debido afianzarse mucho más. Hoy en día, somos directamente implicados en este tan delicado y compasivo acto de amor hacia aquellos que son los mejores compañeros de vida y maestros en las familias. Este momento y la decisión de practicar la eutanasia recae tanto en el profesional médico veterinario al ejecutarla, como en la familia al aceptarla de manera voluntaria y al ser la voz de su querido familiar. Los animales son tan puros como los bebés, no hablan, y es en ese precioso momento donde todo se torna tremendamente difícil para todos los implicados. Tiene que ver con algo mucho más allá del acto mismo que tiene como resultado la muerte, sino con lo difícil y duro que es dejar ir... Es por eso que creemos que este es un acto de profundo amor y debe ser respetado, no solo por la familia que más sufre, sino también debe ser honrado por la vocación de servicio de todos los implicados para poder obtener como resultado de este acto de amor algo íntegro. Al menos sabemos que no disipará la enorme pena por la pérdida, pero sí proporcionará tranquilidad a todos los implicados.

Estamos formando con cariño una RED COMPASIVA de profesionales en todas las áreas implicadas y actores de la sociedad que se sientan alineados, para poder en conjunto generar esta tan anhelada compañía de familia que a veces, en momentos de duelo, solo necesita la presencia y el máximo respeto.


Autoría
Karen Pino Bobadilla

Hoy estamos seguros de algo, y es que algún día nos vamos a morir, tanto yo en lo particular como aquellos a quienes he elegido como mi familia. Cuando ese día se acerque, sea cual sea, me gustaría encontrar a personas que me brinden el auxilio necesario para ayudar de alma a alma, de una manera virtuosa. Entendiendo que el ciclo de la vida es natural y que lo que lo impulsa es el amor. Más allá del significado importante del amor propio, también reside el gran amor por la familia y la salud de aquellos que están en la tierra, tanto de los que parten como de los que ya han partido.